La televisión, prensa y radio cubanas han dado cerrojazo informativo al tema de la salud de Fidel Castro. En los medios de comunicación cubanos, controlados por el Partido Comunista, se acata a pies juntillas la órden dada desde el Gobierno: la enfermedad del comandante y su evolución, son secreto de estado. Y es por ello, que a todas horas en los medios cubanos sólo se ofrecen declaraciones a favor del régimen y mensajes de personas conocidas y anónimas con los deseos de una pronta recuperación para el viejo guerrillero. No hay noticias pues sobre la salud actual de Fidel, pese a que tímidamente ha llegado a correr, proveniente de Miami, el interesado rumor de su muerte.
En Cuba -o al menos aquí en la Isla de la Juventud-, parece que reina una tensa calma, agudizada por las lluvias y tormentas que está dejando el paso de la tormenta tropical Chris por el norte de República Dominicana y Puerto Rico. La vida sigue con el pueblo dedicado a su lucha diaria por sobrevivir lo mejor posible. Eso sí, la calma no ha vuelto para los CDR, la policía y el ejército. La movilización de los reservistas que en estos días se anda produciendo, indica que pese a la aparente calma, la situación es tensa. Desde el incidente de Bahía de Cochinos, aquí se teme una invasión norteamericana en cualquier momento. Y en Cuba, están preparándose para lo que pueda venir.
Mientras, el poderoso
lobby cubano de Miami anda en negociaciones con el gobierno de los EEUU, quien sabe si efectivamente tratando de llevar a Bush hacia la acción militar contra Cuba aprovechando el mal momento de su lider. Sin embargo, no parece que la administración Bush esté interesada en este momento por intervenir en Cuba, según leo entre líneas en el
Nuevo Herald de Miami de hoy. Y es que con la losa de Irak, no deben quedar recursos ni crédito de la opinión pública, para iniciar nuevos intentos de controlar Cuba. Eso sí, para este observador, resulta terrorífico conocer las
declaraciones del portavoz de EEUU Snow sobre Cuba, ofreciéndose a
ayudar al pueblo cubano. Creo que todo cubano debería poder tener una charla con un irakí, afgano o vietnamita antes de decidir aceptar la ayuda del
amigo americano. Probablemente rechazaría tan desinteresada muestra de humanismo y solidaridad.
Niño cubano pide por la pronta recuperación de Fidel, ante un altar de santería en una casa de Nueva Gerona. (foto: Juan Carlos Enrique)